Luego de 10 minutos 
Las
 diez cucharadas de azúcar que contiene un vaso de 
Cola presumen un 
golpe destructor para el organismo. No obstante, Luego de beber una lata
 de 
Coca-Cola una persona no vomita rápidamente, ya que el ácido 
fosfórico suprime el efecto del azúcar.
Luego de 20 minutos 
Hay un aumento de los niveles de insulina en el torrente sanguíneo. El hígado convierte todo el azúcar en grasa.
Luego de 40 minutos 
La
 absorción de la cafeína ya se ha completado. Las pupilas se dilatan. La
 presión arterial aumenta, ya que el hígado libera más azúcar a la 
corriente sanguínea. Los receptores de adenosina se bloquean, impidiendo
 así la somnolencia.
Luego de 45 minutos 
El 
cuerpo aumenta la producción de dopamina, una hormona que estimula el 
centro de placer del cerebro y que tiene el mismo principio de 
funcionamiento que la heroína.
Luego de 1 hora 
El
 ácido fosfórico se une al calcio, al magnesio y al zinc en el tracto 
gastrointestinal, sobrealimentando así el metabolismo. Aumenta la 
supresión de calcio a través de la orina.
Luego de más de 1 hora
Se
 hace sentir el efecto diurético de la bebida. El organismo elimina 
calcio, magnesio y zinc, componentes de los huesos, así como el sodio. 
En este momento la persona se siente irritable o débil. En este contexto
 True Activist se pregunta si los consumidores son juiciosos del 
'cóctel' que están ingiriendo cuando beben una botella de 
Coca-Cola y 
disfrutan de su indudable efecto refrescante.
El ingrediente 
activo de la 
Coca-Cola es el ácido ortofosfórico. Debido a su alta 
acidez, las cisternas en 

las que se traslada el concentrado tienen que 
ser resistentes a materiales altamente corrosivos. En general, la 
composición de uno de los productos más promocionados de la compañía 
Coca-Cola, la Coca-Cola Light sin cafeína, deja mucho que desear. 
Esta bebida contiene agua carbonatada, E150d, E952, E950, E951, E338, E330, E211 y aromas.
El
 agua carbonatada es agua con gas. Provoca secreción gástrica, 
incrementa la acidez del jugo gástrico y causa flatulencia. Además, no 
se utiliza agua mineral, sino agua convencional filtrada.
E150d:
 es un colorante alimenticio obtenido al procesar azúcar a determinadas 
temperaturas, con o sin adición de reactivos químicos. En el caso de la 
Coca-Cola, se le agrega sulfato de amonio.
E952: es ciclamato
 sódico, un sustituto del azúcar. El ciclamato es un producto químico 
sintético con un sabor 200 veces más dulce que el azúcar y que se 
utiliza como edulcorante artificial. En 1969 fue prohibido por la 
Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA), ya que esta 
substancia, igual que la sacarina y el aspartamo, causó cáncer en la 
vejiga urinaria de ratas. En 1975 empezó a prohibirse también en Japón, 
Corea del Sur y Singapur. En 1979 la OMS (Organización Mundial de la 
Salud) volvió a permitir el uso de ciclamatos.
E950: es 
acesulfamo de potasio, un compuesto 200 veces más dulce que el azúcar 
que contiene éter de metilo y agrava el funcionamiento del sistema 
cardiovascular. Asimismo, contiene ácido aspártico, una sustancia que 
también puede excitar el sistema nervioso y con el tiempo puede crear 
adicción. El acesulfamo se disuelve de mal y no se recomienda que lo 
consuman niños ni mujeres embarazadas.
E951: es aspartamo, 
utilizado como sustituto del azúcar en productos para diabéticos. Es 
químicamente inestable, ya que a temperaturas elevadas se descompone en 
metanol y fenilalanina. El metanol es muy peligroso: entre 5 y 10 
mililitros son suficientes para destruir el nervio óptico y causar 
ceguera irreversible. Cuando los refrescos se calientan el aspartamo se 
transforma en formaldehído, un potente carcinógeno.
E338: es 
ácido ortofosfórico. Puede causar irritación de la piel y los ojos. Se 
utiliza para la producción de sales de ácido fosfórico de amoníaco, 
sodio, calcio, aluminio y también en la síntesis orgánica para la 
producción de carbón vegetal y cintas de película, de materiales 
refractarios, cerámica, vidrio, fertilizantes, detergentes sintéticos, y
 en la industria médica, metalúrgica, textil y del petróleo.
E330:
 ácido cítrico. Está muy extendido en la naturaleza y se utiliza en la 
industria farmacéutica y en la alimentaria. Las sales de ácido cítrico 
(los citratos) se usan en la industria alimentaria y, en medicina, para 
conservar la sangre.
E211: es benzoato de sodio, utilizado 
como agente antiséptico y antifúngico en productos alimenticios como 
confituras, zumos y yogures de frutas. No se recomienda que lo consuman 
los asmáticos y las personas que son sensibles a la aspirina. Un estudio
 realizado por Peter Piper, de la británica Universidad de Sheffield, 
desveló que este compuesto causa un daño significativo al desactivar el 
ADN. Esto puede derivar en cirrosis y en enfermedades degenerativas como
 el párkinson.
Los aromas son aditivos aromáticos desconocidos. 
La Coca-Cola Diet es todavía peor, ya que el aspartame, que reemplaza 
el azúcar en este refresco, convierte la bebida en un veneno neurotóxico
 puro.